El cristiano y el trabajo

"Seis días hay en que se debe trabajar" Luc 13:14

"Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros. Porque vosotros mismos sabéis de qué manera debéis imitarnos; pues

nosotros no anduvimos desordenadamente entre vosotros, ni comimos de balde el pan de nadie, sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser gravosos a ninguno de vosotros (...) Porque oímos que algunos de entre vosotros andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno. A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan. Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.(2ª Tes 3: 6-12)

El mismo Señor Jesús enseñó el deber de trabajar para sus seguidores.

Por ello el cristiano debe buscar un trabajo honesto donde el dinero que perciba sea fruto de su propio esfuerzo.

En mi humilde opinión no es sano buscar el dinero en fantasías como sistemas piramidales, especular en bolsa (que no deja de ser una lotería del sistema del "Mammon") o mendigar a los demás lo que uno no es capaz de ganarse con su esfuerzo honrado.

Estas prácticas las he visto en iglesias conservadoras y me han sido personalmente de tropiezo. Tendemos a criticar a creyentes que juegan inocentemente a la lotería, ¿Pero la Bolsa, las divisas o medios especulativos de ganar dinero no están basados en el mismo principio de no ganarse el pan con el trabajo honrado y el "sudor de la frente"?

Un cristiano que juega en bolsa no sabe realmente dónde se está reinvirtiendo su dinero: si en armas, en multinacionales sin escrúpulos, o como he leído en brokers que especulan desde sus oficinas con el precio de alimentos de primera necesidad que producen hambrunas en países del tercer mundo, etc.

Conozco iglesias serias donde se critica a un hermano que juega a la lotería 3€ al mes y sin embargo sus pastores tienen miles de euros invertidos en al lotería mundana de la Bolsa. A mi me parece fariseísmo y una contradicción.

"...y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada"1ª Tes 4:11-12

Aquí el Señor por medio del apóstol insiste en la buena y cristiana ambición de una vida tranquila donde cada uno se dedica a sus propios asuntos sin meterse en la vida de sus hermanos, trabajando con su honrado y noble esfuerzo para de esta manera ser un ejemplo para los no cristianos y no tener que demandar ayudas de nadie.

Principios como estos son los que han hecho de los países protestantes o de base cristiana como los USA las primeras potencias económicas en otros tiempos.

Es lamentable cuando un cristiano que se queda en el paro prefiere disfrutar de él como un parásito en vez de trabajar (el que escribe esto ha estado en paro, no critico a los parados, sino a los que "no quieren" trabajar).

Es lamentable que la aspiración de un cristiano sea vivir de limosnas sociales o de otras personas. Es lamentable que cristianos que perciben una ayuda del gobierno por estar de baja por supuesta incapacidad, se dediquen a ganar dinero no declarado en paralelo.

He conocido hermanos que están de baja laboral definitiva por incapacidad o pre-jubilados por supuesta incapacidad física que se dedican a trabajar en oculto para ganar dinero negro mientras cobran una pensión del estado que les es abonada con el esfuerzo de los trabajadores honrados que pagan sus impuestos. Eso es un muy mal ejemplo además de una gran cara dura.

Y por añadidura eso se llama ROBAR (al menos en mi pueblo lo llamamos así).

"Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros. Porque vosotros mismos sabéis de qué manera debéis imitarnos; pues nosotros no anduvimos desordenadamente entre vosotros." 2ª Tes. 3:5-7

A veces como cristianos olvidamos que la "separación bíblica" no es separarse de hermanos que piensen diferente a nosotros en cuestiones menores de doctrina, sino como dice aquí (dando una orden de parte del Señor Jesús, mire Ud. en el contexto de esta cita) de la gente que lleva una "vida desordenada".

¿A qué se refiere el apóstol con "desordenada"? La respuesta la encontramos si seguimos leyendo:

"...Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Porque oímos que algunos de entre vosotros andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno" 2ª Tes. 3:9-11

Una "vida desordenada" es aquella que lleva el que diciéndose cristiano no es sino un místico que no quiere trabajar honradamente y que dedica el tiempo libre que le queda por esa vida "muelle" de holgazanería a entremeterse en lo ajeno, y a decirle a los demás como deben vivir o pensar.

En el mundo lo más parecido a esto que conozco son algunos políticos, los sindicalistas liberados y los miembros de ciertas religiones mayoritarias, así como supuestos ministros del Evangelio que ganando mucho más mensualmente que cualquier miembro de sus minúsculas congregaciones, no han trabajado en su vida, y además no evangelizan ni hacen otra cosa que vivir una cómoda vida de iglesia sin "mancharse" con el mundo.

Estos mismos principios y advertencias enseñaron y practicaron los primitivos cristianos, como por ejemplo se nos enseña en la Didaké:

"Si el que viene es un viajero, ayudadle en cuanto os sea posible; pero no se quedará con vosotros más de dos o tres días, si es necesario. Pero si quiere establecerse entre vosotros, si tiene un oficio, que trabaje y coma su pan. Pero si no tiene oficio, según vuestra sabiduría proveed de que viva como un cristiano entre vosotros, pero no en la ociosidad. Si no hace esto, es que está traficando con respecto a Cristo. Guardaos de estos hombres".

Mirad lo que decían los inquisidores medievales en el siglo XII sobre los cristianos Valdenses:

"Los herejes valdenses se distinguen por su comportamiento y el habla. Son impasibles y sensatos. No se esfuerzan en llamar la atención con vestidos extravagantes o indecorosos. No son comerciantes con el fin de evitar mentir, jurar o engañar. Viven únicamente del trabajo artesano de sus manos. También sus maestros son tejedores y zapateros. No acumulan riquezas, sino que se contentan con lo necesario para vivir. Comen y beben con moderación, no frecuentan posadas ni van a bailes u otros lugares de mala reputación. Son lentos para la ira. Son trabajadores, se dedican a aprender y a enseñar. Les reconocerán por su manera de hablar: con cordura y veracidad. No difaman, no hablan con palabras vulgares o vacías. Evitan toda expresión que pueda ser mentirosa o de juramento. No dirán "sinceramente" o "de verdad", sino que se limitarán a decir "si" o "no". Según ellos hacen así porque Jesús lo ordenó en Mateo 5:37" (Passauer Anonymus).

Más. Es importante no confundirse: Un misionero o un pastor que trabaja duramente para el Señor y al que el tamaño de su congregación le impide trabajar en un trabajo fuera del ministerio debe ser sostenido -así lo manda el Señor- por los miembros de la misma para que no le falte de nada, pero que tampoco le sobren caprichos comprados con el sudor de los demás.

Trabajo en la construcción. Me levanto a las 6h00 de la mañana todos los días y vuelvo a casa a las 20h00 como muy pronto. Mis obreros, gente muy dura y trabajadora, literalmente desprecian a los vagos y a los que no quieren trabajar.

Por eso (es una opinión personal que seguramente no sea compartida por muchos) en la zona del mundo donde vivo (el País Vasco) veo pocos, por no decir ningún autóctono en las iglesias evangélicas, que se nutren mayormente de cristianos que vienen como inmigrantes o de los propios misioneros y sus familias.

Me apena cuando veo las fotos que envían de sus "logros ministeriales" a sus países: de cada 20 personas que salen solo una o dos son de aquí: el resto hermanos preciosos latinoamericanos ya convertidos en su mayor parte en sus países, o anglosajones. Casi ni un solo vasco o español.

Por último recuerda la gravedad que la doctrina cristiana da a este asunto del trabajo:

"porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo" 1ª Tim. 5:8

Dios te bendiga. Espero que este texto breve te haya ayudado.

Dios te bendiga,

JPV