Los Padres Apostólicos

Tras los llamados "años oscuros", esas fechas de finales del s. I d.c. y principios del s. II d.c. donde nada sabemos de aquellos colaboradores de los apóstoles como Timoteo, Filemón, Bernabé, etc. de los cuales se nos habla tan abundantemente en el Nuevo Testamento, surgen unos personajes a los que llamamos "Padres Apostólicos" puesto que al parecer conocieron en vida a alguno de los apóstoles, recibiendo de ellos la enseñanza del Evangelio (pensemos que el apóstol Juan, el más longevo de los doce, murió en Efeso hacia el año 100 d.c.).

Es por lo anterior que conocer su vida y sus escritos se convierte en tarea indispensable para aquellos que quieren conocer más a fondo cómo el legado de la fe pudo llegar limpio hasta nuestros días, en medio de tantas persecuciones durante los veinte siglos que les siguieron. De igual interés será conocer sus escritos y doctrinas, para aquellos cristianos confundidos por la gran cantidad de nuevas teologías y movimientos que surgen en el seno de las grandes denominaciones cristianas.

Fuente de inspiración para los cristianos "católicos" en el sentido original del término, han tratado de ser usados por las grandes denominaciones para justificar sus posturas teológicas. Así Los Romanos tratan de ver en algunos textos muy forzados de Ignacio o Clemente la primacía de Roma sobre el resto de la cristiandad. Los Ortodoxos y protestantes la independencia del obispo en cuestiones de fe y orden en la iglesia, y los protestantes (especialmente durante la reforma), la plena demostración del Evangelio de la salvación por la pura gracia y misericordia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, sin necesidad de obras, para ganar el cielo.

Por último, no confundir a los "Padres Apostólicos" de los que hablamos, con los llamados "Padres de la Iglesia" de siglos muy posteriores (IV y V d.c.) como Juan Crisóstomo, Agustín de Hipona, etc. (que no son sino los padres del embrión de lo que sería poco después la iglesia católico-romana).

Estos son:

    • Clemente de Roma: Judío, obispo de Roma entre el 92 al 101 d.c. y discípulo del apóstol Pablo. Se le menciona en Filipenses 4:3. La iglesia Católico-Romana le considera el tercer "Papa" al frente de la sede de Roma.

    • Ignacio de Antioquia: Obispo de Antioquia. Mártir en el circo romano en el 110 d.c. discípulo de los apóstoles Pedro y Pablo.

    • Policarpo de Esmirna: Obispo de Esmirna. Discípulo de Juan el apóstol y maestro de Ireneo de Lyon. Quemado vivo como Mártir en el 156 d.c.